Encontrar carne de buey tanto en restaurantes como en supermercados o carnicerías es una ardua tarea, puesto que muchas veces nos tratan de colar la carne de vaca (que también puede ser excelente) por la carne de buey. No obstante, la carne de buey es difícil de producir y, por tanto, es carne que no se encuentra de forma abundante en el mercado.

Aunque a simple vista la carne de buey y la de vaca pueden asemejarse, el sabor, la textura o el precio, son algunos de los aspectos diferenciadores. Te explico a continuación, cuáles son las formas de reconocer la carne de buey auténtica.

6 formas de reconocer la carne de buey

Normalmente, la “carne de buey” que se vende en mercados y restaurantes se trata de carne de vaca vieja (por norma general), puesto que no hay carne de buey para suplir la demanda. Para evitar que te cuelen “vaca por buey”, sigue estos consejos:

Morfología y edad

Los bueyes son animales castrados, es decir, no se reproducen, mientras que las vacas sí. Esta diferencia hace que los bueyes desarrollen una mayor cantidad de carne, además de ofrecer un sabor y una textura diferente que la carne de vaca.

Por otro lado, los bueyes llegan a pesar unos 1.000 kilogramos aproximadamente, además de tratarse de animales más longevos, lo que también otorga características diferenciadoras a su carne.

Grasas 

Existen matices en el aspecto de ambos tipos de carne que te permiten reconocer si se trata o no de carne de buey auténtica. Por un lado, el color de la grasa de la carne de buey suele ser de color amarillento o ámbar, mientras que la grasa de la carne de la vaca suele ser de color blanco. 

Color 

Otro de los indicativos para reconocer la carne de buey es el color de la misma. En el caso de la carne de buey, esta es de un tono rojo intenso, en el caso de la vaca, el tono de la carne es menos intenso. 

Sabor

Si ya has comprado un chuletón y quieres saber si se trata de carne de buey, el sabor puede ayudarte a detectar su autenticidad. Debido a las características del buey, sus años, el periodo de maduración o la raza, entre otros motivos, el sabor de su carne es mucho más intenso.

Precio

Debido a los costes de producción que comentaba anteriormente, además de su dificultad, la escasez y calidad de la carne de buey, hace que su precio sea más elevado que el de la carne de vaca.

Etiquetado 

Por último, el etiquetado. La carne debe estar etiquetada como producto de buey para  garantizar que se trata de carne de buey, además de que se encuentre citada la denominación de origen y el corte de la pieza.

Dónde encontrar carne de buey auténtica

Si quieres comprar carne de buey auténtica, debidamente certificada y procedente de ejemplares únicos, entonces te animamos a que visites la tienda de El Capricho.

Los bueyes del El Capricho son animales que destacan tanto por la nobleza de su carácter como por el conjunto de aspectos como la edad, el trabajo, la textura y el sabor exquisito, entre otros, siendo esto una experiencia única para el paladar. 

Además, teniendo en cuenta que cada ejemplar de manera individual recibe la maduración necesaria (la mayoría con más de 140 días), el mejor lugar para comprar y degustar un buen chuletón de buey es de la mano de El Capricho.